Vinos y helado: ¿es posible combinarlos?
A veces, es necesario arriesgarse y probar las mezclas más extravagantes para encontrar grandes maridajes, como la que te traemos hoy. ¿Te atreverás a maridar vino y helado? ¡Llega la combinación estrella del verano!
Dedicado a los amantes del helado casero y el buen vino, hoy demostramos que la unión de estos dos elementos es totalmente factible. Descubre con nosotros algunas de las mejores propuestas para saber cómo maridar vino y helado.
Helado, el producto estrella del verano
Con el buen tiempo, el helado es una de las opciones favoritas para refrescarnos y endulzar nuestro paladar. Sirve tanto como postre como merienda (o como capricho a cualquier hora, para qué engañarnos...) Y sus sabores son tan variados como deliciosos. ¿A quién no le gusta un rico helado casero? Por eso, queremos ofrecerte una nueva forma de saborearlo y, cómo no, nuestra propuesta es hacerlo con vino.
Cierto es que, de entre todas las opciones para maridar postres, maridar vino y helado es probablemente una de las más complicadas. O, por lo menos, de las menos populares, ya que, debido al frío, nos cuesta un poco más apreciar los matices del vino. Sin embargo, con unos simples consejos, podemos llegar a encontrar la combinación perfecta.
Con qué vino maridar cada helado
Vino tinto, rosado, blanco... ¿Por cuál me decanto? Como hemos comentado, para saber qué vino es el más adecuado para el helado, debemos tener en cuenta el tipo de helado que vamos a comer.
A continuación, te dejamos algunos ejemplos:
Helados de chocolate
El vino y el chocolate siempre han sido grandes aliados. Y es que el cacao posee una particularidad aromática que combina a la perfección con los matices y el sabor de un buen vino. Por eso, su versión en helado no podía ser menos especial para este maridaje.
Al igual que pasa con su maridaje cuando es una onza o tableta, elegir el vino perfecto para maridar con helado de chocolate dependerá de su tipología. O, dicho de otra forma, de su grado de pureza.
- Helados de chocolate blanco: lo que más nos interesa en estos casos es resaltar la cremosidad tan característica de esta variedad de chocolate. Por eso, lo mejor es decantarse por un vino suave de uva blanca, como un Chardonnay.
- Helados de chocolate negro: a medida que subimos el grado de cacao, podemos empezar a jugar con vinos más robustos e intensos. Para los helados de chocolate negro, nada como combinar su agradable y ligero amargor con un vino crianza. En este caso, te recomendamos El Coto Crianza Garnacha, ya que sus delicados matices (aromas de cereza y fruta roja, moka y cacao) harán un contraste excepcional con tu tarrina de chocolate. Te sorprenderá.
Un apunte importante, procura que el vino siempre sea igual o un poco más dulce que el chocolate que vas a consumir.
Helados afrutados
Coco, mango, cereza, menta, frutos rojos... ¡Las opciones son infinitas! Los helados de frutas son otra de las opciones más populares durante el verano. Son más ligeros, jugosos y refrescantes, por lo que no es de extrañar que arrasen tanto.
Para maridar este tipo de helados, las apuestas más seguras son vinos suaves, que permitan encontrar un equilibrio entre sabores. En este sentido, nos decantaremos siempre por una uva blanca. De hecho, si te fijas, la gran mayoría de helados están elaborados a partir de un ingrediente, la leche. Por este motivo, y como norma general, siempre será más fácil maridar helados con vino blanco o rosado, que con un tinto.
Por ejemplo, puedes probar con El Coto Semidulce, un vino sorprendentemente refrescante con aromas a piña y cítricos, pero con una dulzura embriagante. Los vinos espumosos también son unos grandes acompañantes para estos helados.
El caso de los sorbetes
Aunque no estén considerados como tal, este es un semihelado muy frecuente y recurrido, sobre todo en comidas y eventos en verano. ¡Y se puede maridar con vino!
En este caso, el que mejor se puede adaptar, tanto por su frescor como por su suavidad, es un vino rosado. El Coto Rosado, por ejemplo, está hecho con uvas Tempranillo y Garnacha y, gracias a estos, conseguimos un vino goloso de fresas frescas y caramelo. Este le aportará la vitalidad adecuada a tu sorbete, aportando el equilibrio perfecto entre dulzor y frescura. ¿A qué esperas para probarlo?
Helados de vino
Queda demostrado, el helado puede elaborarse y combinarse prácticamente con cualquier cosa. Y, aunque nos hemos centrado en el maridaje de vino y helado, no está de más mencionar esta alternativa más. ¿Sabías que hay helados hechos directamente con vino?
En España, por ejemplo, algunas heladerías artesanales se han aventurado a elaborarlos, aunque su consumo no es tan frecuente y se suele reservar para eventos privados. ¿Has tenido la oportunidad de probar alguno? El resultado es realmente sorprendente.
En 2014, de hecho, una empresa americana decidió lanzar una línea de helados de vino bajo el nombre de WineCream. Mediante un arduo proceso de elaboración junto a diferentes chefs, consiguieron la fórmula para crear un producto que respeta, incluso, la graduación de alcohol del vino. A nuestro pesar, de momento, solo es posible degustarlos en las zonas de Maryland y Washinton DC.
¿Qué te ha parecido? Descubre los mejores maridajes para el vino, sea de la clase que sea, con nuestros contenidos especiales del blog de El Coto de Rioja. Aquí te dejamos una selección: