El vino, esa bebida ancestral que ha sido acompañante de celebraciones y momentos especiales a lo largo de la historia, está envuelto en un velo de misterio y mitos. Aunque algunos de estos pueden tener cierta base, muchos otros son simplemente falsas creencias que han perdurado a lo largo del tiempo. En este artículo, desentrañaremos algunos de los mitos más comunes sobre el vino que es hora de dejar atrás.
Los mitos más extendidos sobre el vino, ¿qué hay de cierto?
1. Los vinos tintos deben ser servidos a temperatura ambiente
Este es uno de los mitos más arraigados. Si bien es cierto que los vinos tintos se disfrutan mejor a una temperatura más alta que los blancos, «temperatura ambiente» varía según la región. En climas cálidos, la temperatura ambiente puede ser demasiado alta para apreciar adecuadamente un vino tinto. La temperatura recomendada para servir vinos tintos oscila entre 15-18°C, lo que puede significar refrigerar ligeramente la botella antes de servirla.
2. El vino viejo siempre es mejor
Si bien algunos vinos mejoran con la edad, no todos están destinados a envejecer. La mayoría de los vinos comerciales están diseñados para ser disfrutados jóvenes y frescos. Solo ciertos tipos de vinos, como algunos tintos robustos y blancos de guarda, se benefician del envejecimiento en la botella. Además, el envejecimiento no puede salvar un vino de mala calidad, así que asegúrate de comprar vinos con potencial de envejecimiento si planeas almacenarlos durante mucho tiempo. En este artículo te recomendamos cómo guardar el vino en casa.
3. Cuanto más caro, mejor es el vino
El precio de una botella de vino no siempre refleja su calidad. Muchas veces, estás pagando por el prestigio de la bodega, los costes de comercialización y distribución, o simplemente por la escasez del vino. Hay vinos asequibles que ofrecen una excelente relación calidad-precio y pueden superar a opciones más caras en catas a ciegas.
Los vinos de El Coto de Rioja están pensados para poder disfrutar del mejor vino al mejor precio, sin perder la esencia y la tradición que caracteriza a la Denominación de Origen Calificada Rioja (D.O.Ca Rioja), y bajo sus estrictos controles de autenticidad y calidad.
4. El corcho es superior al tapón de rosca
Aunque tradicionalmente se asociaba el corcho con la calidad del vino, la realidad es que los tapones de rosca han demostrado ser igual de efectivos para preservar el vino y, en muchos casos, incluso más confiables para prevenir la oxidación y el deterioro. Los tapones de rosca también eliminan el riesgo de contaminación por TCA (tricloroanisol), responsable del «sabor a corcho» en algunas botellas.
5. El vino blanco marida con platos de pescado y el vino tinto con las carnes
Si bien esta regla general puede ser útil como punto de partida, no hay razón para limitarse a ella de manera estricta. La elección del vino depende más de la preparación y los condimentos del plato que del tipo de proteína. Por ejemplo, un vino blanco con cuerpo como nuestro 875m Blanco Fermentado en Barrica puede complementar perfectamente un plato de pollo asado, mientras que un tinto suave puede maridar bien con un plato de salmón a la parrilla.
6. El vino tinto debe oxigenarse durante horas antes de servirlo
Mientras que algunos vinos pueden beneficiarse de la aireación, no todos necesitan horas para abrirse. Muchos vinos están listos para beber poco después de abrir la botella como los vinos jóvenes o con poca crianza.
7. Los vinos blancos no pueden envejecer
Aunque la mayoría de los vinos blancos son más adecuados para ser consumidos jóvenes, hay excepciones. Algunos vinos blancos de alta calidad pueden mejorar con el tiempo, como Coto de Imaz Reserva Blanco, un vino criado durante 12 meses en barricas de roble francés y 12 meses en botella. Gracias a esta crianza sobre lías finas en barrica, conseguimos un vino extraordinariamente persistente y muy aromático, con notas florales y frutales.
8. El vino más oscuro es siempre más fuerte
El color del vino no está directamente relacionado con su fuerza. La intensidad del color puede estar influenciada por factores como la variedad de uva, el proceso de vinificación y el tiempo de envejecimiento.
9. Los vinos orgánicos son siempre mejores
Es cierto que los vinos orgánicos se cultivan sin pesticidas y productos químicos sintéticos, pero esto no garantiza su calidad. La calidad del vino depende en gran medida de factores como la variedad de uva, el clima, el suelo, las prácticas de vinificación y la habilidad del enólogo.
¿Habías escuchado alguno de ellos? Esperamos que este artículo te haya ayudado a disipar falsos mitos sobre el vino y que puedas disfrutarlo más y mejor. ¡Salud!