Diccionario del vino: 5 palabras para descubrir (A-B)
¡Damos por inaugurado nuestro Diccionario del vino! A partir de ahora, todos los meses repasaremos conceptos y palabras del mundo del vino que quizás no conozcas o no tengas muy claro qué significan, así como otro tipo de curiosidades relacionadas con ellas.
Y es que dentro del mundo vitivinícola hay muchísima terminología propia que resulta desconocida o compleja incluso para todos aquellos amantes del vino que lo consumen de manera frecuente. ¡Pero para eso estamos aquí!
Comenzamos con 5 palabras que seguro te son en mayor o menor medida familiares. Esperamos resolver tus dudas ¡y sorprenderte!
Añada
Hay quién le llama “cosecha”, hay quien le llama “añada”. Esta palabra del Diccionario del vino hace referencia al año en el que se ha recogido la uva de un determinado vino. ¿Y esto qué implica? Pues bien, que, en función de las condiciones climatológicas de ese año de recogida, esas uvas tendrán un crecimiento y maduración determinados.
Eso sí, no debemos pensar que únicamente lo que denominamos “una buena añada” conseguirá un vino excepcional con toda garantía: son más las condiciones que han de darse para que esto suceda. Por supuesto, las condiciones de ese año influirán (y mucho), pero no lo serán todo.
¿Cómo podemos saber la añada de un vino? Normalmente lo veremos reflejado en la etiqueta del mismo (aunque no es obligatorio ponerla). Por ejemplo, nuestro Coto de Imaz Reserva es añada 2016. Te aseguramos que está ESPECTACULAR. ¿Lo has probado ya?
Astringente
¿Alguna vez habías escuchado decir de un vino que es “astringente”? Pues bien, cuando hablamos de un vino astringente o que tiene astringencia, nos referimos a aquellos que, cuando los catamos, provocan un conjunto de sensaciones de sequedad, aspereza y rugosidad en boca.
Es una sensación un tanto compleja de definir que, obviamente, se advierte en la fase de gusto de cualquier cata y que está provocada por los taninos al reaccionar con la saliva. Los taninos son esas sustancias (de las que hablaremos también más adelante en esta serie de Diccionario del vino), que además de aportar el carmesí característico del vino, nos dan esa sequedad y amargor.
Afrutado
Continuamos con otro término de nuestro Diccionario del vino. Los vinos afrutados, también conocidos como vinos frutales, son todos aquellos que nos evocan a fruta, tanto en olor como en sabor. ¡Y no necesariamente a uva, lógicamente!
Un vino afrutado puede traernos al paladar, la nariz y la memoria, recuerdos de grosellas, plátanos, albaricoques, melocotón, ciruela, frambuesa… Una característica que no debemos confundir con el dulzor, que es una particularidad diferente. Los vinos afrutados no son dulces.
Los vinos afrutados suelen ser jóvenes, aunque hay vinos de una maduración superior que, dada la especial selección de las uvas, no pierden ese toque frutal con el tiempo. Además, esta característica de olor y sabor podemos encontrarla tanto en vinos tintos, como blancos y rosados.
En el caso de nuestra bodega, te recomendamos que no te pierdas nuestro 875 M Chardonnay, que respeta esos aromas frutales y florales de la variedad, y combina las notas de una fruta tropical como es la piña, con un delicado aroma de vainilla. Suena demasiado bien como para no probarlo…
Aroma
Cuando hablamos de aroma en un vino nos referimos al olor agradable de un vino que permite la estimulación del sentido del gusto. Sí, agradable. ¿Por qué? Porque cuando hablamos de matices desagradables dentro del mundo del vino (como puede ser a humedad del corcho), lo llamamos olor, no aroma. Eso sí, el aroma del vino, aunque lo mencionemos en singular, son 3 tipos de aromas distintos:
- Aromas primarios: son los propios de la cepa, de la variedad de uva con la que está elaborado ese vino. Los percibimos al inclinar la copa, cuando aumentamos la superficie del vino que queda en contacto con el aire.
- Aromas secundarios: son los aromas que nos indican los procesos fermentativos que se han producido en el vino, como la fermentación alcohólica o maloláctica. Los notamos al girar el vino en la copa.
- Aromas terciarios: también conocido como bouquet, son los aromas que el vino ha adquirido durante la crianza, ya sea en barrica o en la maduración en botella.
¡Profundizaremos mucho más en el mundo de los aromas, así que muy atento a nuestro blog!
Boj
Es probable que esta palabra sea una de las más desconocidas de nuestro primer Diccionario del vino. ¡Y es normal! No es una palabra que solamos escuchar, pero vamos a tratar de definirla de la mejor manera posible.
Cuando hablamos de boj en vino, hablamos normalmente de un aroma. Un aroma que es característico de una planta que lleva este nombre. Un olor amargo, penetrante. Está normalmente presente en vinos cuya variedad de uva es Sauvignon, en la que se una molécula (la mercapto-4-metilo-4-pentan-2-ona, concretamente), que proporciona un poderoso aroma de boj, que también podemos denominar como “aroma de retamas”. ¿No te parece súper curioso?
Dentro de nuestros vinos, El Coto Selección Viñedos Blanco, tiene aromas a boj típicos de esta variedad cultivada en zona fría, así como a frutas tropicales combinadas con cítricos. ¡Es espectacular!
¡Esperamos que hayas descubierto algo nuevo que no sabías!
Antes de irte, no te pierdas otros artículos de nuestro blog y las siguientes ediciones del Diccionario del vino. Estamos seguros de que ¡te van a encantar!